Pérdida imperdonable

No está muy claro cómo ha pasado, quién ha dicho qué o cuál ha sido la causa. Enfado. Suena horriblemente mal. A no ser que empleemos esa infalible arma blanca que es el sarcasmo, no existe manera alguna de pronunciar esa palabra con una sonrisa en la cara.

Se traduce en que de repente, parece que todo lo vivido y todo el cariño se hayan volatilizado. Pero no nos equivoquemos, nada se ha ido.

El ser humano se retracta de sus errores para crecer. No tener errores significa no crecer. Por lo que cometer errores es parte del proceso. Enfadarse por ello es, visto desde la perspectiva más impasible, entorpecer la evolución de una persona.

Pero hay mucho más. Esta era la forma más mecánica de verlo. Pasemos a lo que nos llega adentro, a lo que duele. Es una sensación de malestar, donde la conciencia dice que algo va mal. No es nuestro estado natural y no tenemos muy claro cómo actuar. Ahí es donde todo se complica. Seguir leyendo «Pérdida imperdonable»

Construir recuerdos

Pensemos en calor (mucho calor), gente (montones de gente) y a esto sumémosle estar lejos de casa o simplemente alguna que otra salida. ¡Bingo! LleAgostoga agosto.

«¡Por fin!» dirá la mayoría. «¿Y qué?» dirán los que hayan elegido tener vacaciones en otro momento. Y «aaag» dirán los que encuentren imposible moverse por la ciudad o topar un centímetro de arena en el que colocar la sombrilla.

Luego estamos los estudiantes, que pensamos en nuestros tres meses de vacaciones y nos damos cuenta de que ya solo nos queda la mitad. Pero, cómo no, nos reconforta saber que estamos rodeados de gente que se entusiasma con sus primeras semanas de descanso. Aunque mejor no regocijarse mucho, porque tarde o temprano seremos los que se maravillen con esas semanitas de agosto. Seguir leyendo «Construir recuerdos»

Renacer

¿Renacer? Nacer de nuevo, después de la muerte real o aparente.Renacer

Una vez más estamos aquí, luego de tanto tiempo, para volver a escribir, para continuar con esta aventura que empezamos hace casi 20 meses y que, por una cosa u otra, abandonamos. A pesar de que prometíamos no hacerlo.

Hemos fallado, nos hemos fallado y lo importante: os hemos fallado.

Pero lo único que tenemos que hacer para que esto quede como algo del pasado es no darle más importancia de la que se merece, aprender de los errores y sobre todo no repetirlo. Seguir leyendo «Renacer»

Oportunidades

Todos hemos sentido miedo alguna vez. Es una sensación escalofriante, que te invade de pies a cabeza haciendo que cuerpo y mente se muevan por emociones, dejando lo racional a un lado y centrándose en esa parte de nuestra mente llamada sularge (19)bconsciente.

Existen diferentes clases de miedo y este puede ser gestionado de mejor o peor manera, pero lo que bajo ningún concepto podemos permitir es que nos sobrepase.

En ocasiones, hasta intentamos negarnos a nosotros mismos que lo estamos sufriendo, puesto que esa parece la manera más efectiva para vencerlo. Pero en realidad, si queremos que el miedo deje de importarnos y controlarnos, lo más efectivo que podemos hacer es conseguir pasarle por encima. Para esto, lo más acertado es demostrar que podemos con él, que no nos impide conseguir nuestros objetivos. Y cuando lo consigamos, ese será el momento en el que podamos decir que hemos vencido al miedo.

Ahora bien, conseguir esto no será fácil, pero contamos con infinidad de oportunidades. Lo único que tenemos que hacer es aprovecharlas al máximo, porque eso hará que aparezcan más y más. Seguir leyendo «Oportunidades»

Pequeñas importancias

Todos los días nos levantamos y no valoramos casi nada de lo que ocurre a nuestro alrededor. A esa vecina que nos da los buenos días cada mañana, a ese camarero que nos sirve nuestro café cortado templado siempre a nuestro gusto, al barrendero que hace que nuestras calles estén siempre limpias…large (12)

Seguramente nunca os habíais parado a pensar lo importante que son en nuestras vidas, porque a pesar de ser pequeños los gestos que hacen por nosotros, son muy importantes y si faltasen notaríamos su ausencia enseguida. Debemos aprender a valorarlos y a agradecer todo lo que hacen por nosotros día tras día, porque tal vez cuando nos demos cuenta de ello ya será demasiado tarde.

Siempre nos centramos en las grandes cosas: en un concierto, en un día concreto… Pero todo eso pasa, es un día y se acabó, por muy bueno que sea, por mucha ilusión que nos haga, se acaba. Mientras que las pequeñas cosas son las que realmente forman nuestra felicidad, nuestro día a día. Y no podemos desaprovecharlas, ni unas ni otras, porque todo es necesario, así como es igual de necesario reconocer su importancia. Seguir leyendo «Pequeñas importancias»

Días

Es inevitable. Cuando te esfuerzas en conseguir algo y hagas lo que hagas, nada sale bien; ese es el mejor momento para recordar a la gente que “tengo un mal día”. Y con ello, todos los errores y tropiezos se verán justificados, puesto que, ¿quién no ha tenido nunca un mal día?large (12)

Todos sabemos de qué va, por lo que todos sentimos empatía y compasión por la persona afectada. Ahora bien, no debemos abusar de esta frase y emplearla como disculpa cada vez que no podamos conseguir algo. Porque ‘un mal día’ es solo un día. Así que si consideras que tienes muchos más y muy seguidos, entonces la culpa no será del día, será tuya por no intentar hacer que ese día malo mejorase.

Y esa es la explicación de por qué únicamente tenemos un día malo: porque si la cantidad aumenta es tu deber parar toda esa ‘mala suerte’. A partir de un día, debes ser tú el que luche contra esos hechos que te impiden hacer las cosas correctamente, porque no hay ganancia sin sacrificio. Seguir leyendo «Días»

Benditos lunes y malditos sábados

Siempre hemos juzgado los lunes, como si fuesen el peor día de la semana, he de decir que yo siempre dije que lo eran los domingos. Aún así, me paro a pensar y me pregunto: «¿por qué?«. ¿Por qué digo que hoy es el peor día de la semana?large-1 Puede ser que porque tengo que ir a trabajar o que tengo que estudiar y, consecuentemente, tengo que madrugar. Y que además, como persona normal que soy, me gusta dormir hasta la hora que me de la gana sin que me despierten, pero… ¿Es que a nadie le gusta lo que hace con su vida? ¿Es que nadie ve algo positivo en los lunes?

Puedo llegar a comprender que no nos guste el hecho de levantarse a las 7:30 para ir a trabajar, pero no que no te guste nada de lo que vayas a hacer ese día. Y si no te gusta… replantéate seriamente lo que estás haciendo con tu vida, porque seguramente estés desperdiciando días de tu corto período vital trabajando simplemente para ganar dinero, que aunque sea muy necesario, no es lo fundamental si tu trabajo te amarga todos los días laborales del año. Que, precisamente, no son pocos. Seguir leyendo «Benditos lunes y malditos sábados»

Oro parece

Durante gran parte de mi vida he escuchado esa frase tan repetitiva que dice que “el tiempo es oro, la cual suelo cuestionar con una frase que empleo también en numerosas ocasiones: hay tiempo, siempre hay tiempo.

Ante esto, la mayoría de la gente relaciona mi respuesta con calificativos como exagerada, goldimpuntual o simplemente, perezosa. Pero creo que muy pocos se han tomado la molestia de preguntarse o preguntarme cuál es su verdadero significado, dado que parece que no han entendido nada de lo que les quería decir.

Cuando afirmo que siempre hay tiempo, me refiero literalmente a eso. En primer lugar, porque cada uno tiene una percepción diferente cual es la cantidad ‘normal’ de tiempo. Y en segundo lugar (y aquí viene tan que poca gente percibe),  porque sea el momento que sea, cuando sea, siempre podrás encontrar tiempo para hacer lo que realmente quieres hacer.

Si en verdad quieres algo, lo necesitas, te hace disfrutar o sentirte bien, nunca encontrarás límites ante ello, siempre buscarás la manera de conseguir tus objetivos, eso sí: con trabajo y esfuerzo. Y el tiempo, (¿qué tiempo?) pasará a no ocupar una sola parte de tu memoria. Seguir leyendo «Oro parece»

¿Y SI TIENES UN PROBLEMA?

Nos encontramos con miles de problemas en nuestra vida, y eso no cambiará. Somos seres imperfectos, y en verdad doy gracias por serlo. ¿Os imagináis un mundo de robots perfectos? Sin problemas, sin días malos… Sería realmente aburrido, sería muy frustrante. No tendríamos tampoco días buenos, ni esa sensación que sientes cuando has2_great-stress-reliever solucionado con éxito un problema que, al principio, parecía imposible de resolver.

Siempre que nos encontramos con un problema en nuestra vida nos agobiamos, nos frustramos, nos inquietamos y no somos capaces de pensar en otra cosa. Pasamos muchos minutos, incluso horas y días, de nuestra vida, pensando en el problema, preocupados, cuando en realidad en lo que deberíamos haber pensado desde el principio sería en la solución. Deberíamos haber dejado el problema de lado y buscar soluciones a lo loco, dejando de lamentarnos por lo que pudo ser y no fue, algo que hacemos muy habitualmente. Seguir leyendo «¿Y SI TIENES UN PROBLEMA?»

IN – MADUROS

Siempre hemos oído decir que eso de que “con el tiempo, al final madurará”, y puede que no fuese precisamente referido a un adolescente.

experiences

La verdad es que tengo mucha curiosidad por saber cuándo conseguiré madurar del todo, ver las cosas como un adulto y no equivocarme nunca, como se nos vende con su gran madurez. Pero me temo que me costará darme cuenta cuando pase, porque posiblemente no suceda de un día para otro, y además aún nadie me ha enumerado las características de una persona madura, excepto claro, que al ser más maduro se cometen menos errores.

Aunque debe ser porque estoy madurando, pero comienzo a plantearme que esto no sea del todo cierto, ya que cada vez me fijo más en ellos, en los adultos. Y precisamente así he podido ver que errores los comete todo el mundo. Puede que unos cometan más que otros, pero no tiene nada que ver con la edad o madurez.

Habitualmente vemos la inmadurez como algo tremendamente negativo que infantiliza a la persona e impide que esta crezca y se convierta en adulto. Pero, ¿y si estuviese bien ser algo inmaduros? Seguir leyendo «IN – MADUROS»